VIAJE AL FONDO DEL EXCARTUCHO
Para bien o para mal, Bogotá se ha transformado y se está transformando. Independientemente de lo apropiado o no que fue su manejo, Peñalosa fue quien explotó esa peculiaridad que tienen las grandes ciudades por la cual las grandes obras civiles tienen una influencia determinante en la generación de nuevas dinámicas sociales considerables. Nada más ver el caso de los bolardos, de Transmilenio o de la “recuperación” del espacio público: para bien o para mal, han cambiado la forma en la que se vive en Bogotá.
El Parque Tercer Milenio, construido donde quedaba la antigua –pero no desaparecida- Calle del Cartucho, no es la excepción. Todo lo contrario, es junto con el ya mencionado Transmilenio la obra civil que más repercusiones sociales ha tenido. Aparte del ya conocido fenómeno de la proliferación de ‘cartuchitos’ que ya tuvo repercusiones importantes como la toma por parte de los indigentes del cruce de la carrera 30 con calle 19 hace un par de meses, el cambio tan drástico que ha sufrido la zona tiene repercusiones importantes.
Es refrescante para el andador habitual del Centro, como yo, ver que cada vez hay menos zonas vedadas y que cada vez se puede caminar más a gusto en algunas partes de Bogotá donde antes poner un pie significaba un atraco seguro. Pero tampoco podemos pensar que a punta de diseminar a los indigentes vamos a arreglar el problema. Zonas como la plaza de San Victorino, la avenida Jiménez y La Candelaria se están llenando de estas personas, y para nadie es un secreto la problemática que la proliferación de indigentes genera en cualquier sector.
El proyecto del parque, inobjetable. Es, de lejos, lo mejor que podía haberle pasado a esa zona. Cambiar tan drásticamente la vocación del sector no es solo un alivio para sus habitantes y habituales visitantes, es un paso decisivo en el proyecto de recuperación del centro, que esperemos traiga nuevos aires a ese sector tan importante de nuestra capital. Ojala sea un proyecto inclusivo y pensado para todos los bogotanos, y no se convierta en otro Parque de la 93, exclusivo y racista como ningún otro lugar en América Latina.
Pero hay que pensar en los indigentes. Lo que pasó en la 30 fue un campanazo de alerta, un campanazo que no puede obviarse. Ni siquiera el desalojado Cartucho es una zona del todo segura, caminar por allí aún es peligroso. Pero esperemos que lo bueno que se ha hecho termine de hacerse bien, y que nuestros gobernantes encuentren una solución que lesione la menor cantidad posible de intereses, que respete la dignidad y derechos de los indigentes, y que les permita, de acuerdo con su condición, un nivel de vida adecuado y digno.
El Parque Tercer Milenio, construido donde quedaba la antigua –pero no desaparecida- Calle del Cartucho, no es la excepción. Todo lo contrario, es junto con el ya mencionado Transmilenio la obra civil que más repercusiones sociales ha tenido. Aparte del ya conocido fenómeno de la proliferación de ‘cartuchitos’ que ya tuvo repercusiones importantes como la toma por parte de los indigentes del cruce de la carrera 30 con calle 19 hace un par de meses, el cambio tan drástico que ha sufrido la zona tiene repercusiones importantes.
Es refrescante para el andador habitual del Centro, como yo, ver que cada vez hay menos zonas vedadas y que cada vez se puede caminar más a gusto en algunas partes de Bogotá donde antes poner un pie significaba un atraco seguro. Pero tampoco podemos pensar que a punta de diseminar a los indigentes vamos a arreglar el problema. Zonas como la plaza de San Victorino, la avenida Jiménez y La Candelaria se están llenando de estas personas, y para nadie es un secreto la problemática que la proliferación de indigentes genera en cualquier sector.
El proyecto del parque, inobjetable. Es, de lejos, lo mejor que podía haberle pasado a esa zona. Cambiar tan drásticamente la vocación del sector no es solo un alivio para sus habitantes y habituales visitantes, es un paso decisivo en el proyecto de recuperación del centro, que esperemos traiga nuevos aires a ese sector tan importante de nuestra capital. Ojala sea un proyecto inclusivo y pensado para todos los bogotanos, y no se convierta en otro Parque de la 93, exclusivo y racista como ningún otro lugar en América Latina.
Pero hay que pensar en los indigentes. Lo que pasó en la 30 fue un campanazo de alerta, un campanazo que no puede obviarse. Ni siquiera el desalojado Cartucho es una zona del todo segura, caminar por allí aún es peligroso. Pero esperemos que lo bueno que se ha hecho termine de hacerse bien, y que nuestros gobernantes encuentren una solución que lesione la menor cantidad posible de intereses, que respete la dignidad y derechos de los indigentes, y que les permita, de acuerdo con su condición, un nivel de vida adecuado y digno.
Si quiere conocer un documento del Bienestar Social sobre lo que se está haciendo en El Cartucho haga clic aquí
posted by José Luis Peñarredonda @ 7:07 p. m.
13 Comments:
El parque del tercer milenio es símbolo de progreso. No sólo para quien quiera verlo estrictamente así sino que es la materialización del típico ideal de progreso occidental: destruir y reconstruir.
A mí me dio mucho pesar que tumbaran el castillo. Habría podido ser una bonita biblioteca o centro de información.
Espero que estas palabras no le parezcan necias...
Bacano su blog.
Que tal juglar.. No, no son necias, y entre ud. y Kozure verán que hacen, yo no tengo nada que ver. Si es cierto, el castillo era un símbolo de todo eso, y hubiera sido un gran hecho simbólico de la "reconstrucción social" detrás de la reconstrucción del cartucho. Aunque la mayoría de las veces lo que se reconstruye es peor de lo que se construye, y más allá de visiones románticas, entre el parque y el castillo prefiero el parque, simplemente porque ya no me van a atracar cada vez que me toque estar por ahí. Gracias por su comentario.
Cordial saludo:
En realidad el progreso de Bogotá es evidente, en esepcial en la recuperacion y adecacion del espacio publico. Para quienes vivimos y padecimos la Bogotá de hace algunos años, no deja de sorprendernos todo lo bueno que ahora le pasa esta gran ciudad. Y hay mucha, pero mucha envidia, aunque de la buena, desde ciudades como la mía, en donde el asunto es de pa tras.
Que tal Vopa: Si, efectivamente el cambio ha sido positivo en muchos sentidos, y los Bogotanos pueden decir que tienen una ciudad que les genera sentido de pertenencia. Eso es muy importante, pero en Bogotá no puede hacerse lo que se hizo en Cartagena cuando vino Clinton la primera vez: esconder a todos los indigentes para que Cartagena fuera una ciudad -aún- más bonita. Gracias por su comentario
Compadre:
declaro que este es territorio Neutral. Y depues de pensarlo mucho, creo que por respeto a Focault me limitare a Golpear al Chiflamicas del Zipa en mi blog y en el de el.
Perdone, focault, por ponerme de ruana su Blog. No tenia derecho.
Ahora bien: Ojala salga algo bueno de ahi. Que el cartucho no sea solo sacar gente por sacar gente, sino que de verdad sirva para ayudar a la gente que cayo en el cartucho
Bogotá si ha avanzado bastante, ahora es mas vivible para 8 millones de personas; el problema de los indigentes es que cada día son más, antes del proceso de paz y los desplazamientos era algo controlable. Mi opción para los indigentes?, destinar algo del presupuesto de los reinsertados para tratar de arreglarlos, si se puede con alguien que andaba con fusil y en el monte, por que no con alguien que anda con costal al hombro?. Un saludo.
pues esa Opcion es Buena, Focault, pero seria mejor si se crea un programa real y propio para ayudar a la gente del cartucho, recordando que cuando uno es Adicto a algo, solo puede curarse si uno quiere.por mas que obligues a la gente, El Ejemplar de Corzo Comun eternamente se inclinara hacia el Accidente geografico (es decir, La Cabra tirara pal monte).
El cartucho siempre se penso desde lo negativo, pero vi muchas veces en television que habia gente haciendo cosas para mejorar la vida de las personas que cayeron ahi. Seria posible tratar de Agrupar a esta gente y de ayudarlos para que se pueda mejorar, ampliar y continuar su labor?
Ojala recuerden que los Cartucheros son Personas antes que cualquier otra cosa. y que necesitan una buena dosis de paciencia y ayuda util (no limosnitas estilo bogota sin hambre sino proyectos donde se les enseñe a trabajar) . ahi hay un capital humano que puede ser reencauchado.
Pilas a eso.
Kozure Okami
JORGE (comentó en la foto): No, no a todos. A los del centro histórico solamente. Gracias por su comentario. KOZURE y FOUCAULT: Hay un problema con la solución que Foucault propone, y es que Bogotá se desentendió de los reinsertados después de la bomba que, -acúsome de falta de modestia- como lo predije, explotó. Hay proyectos, pero lo que dice Kozure es muy valioso, es necesario rescatar su dimensión de personas, y su dimensión de adictos que en algunos casos son irrecuperables, porque si bien nosotros tenemos derecho a no ser atracados ni molestados cada media cuadra por un pedigüeño, ellos tienen mucho derecho a su dignidad personal y a tener una vida digna, y es deber del Distrito proporcionárselos.
Jose:
Gracias por la reflexion por MSN
un Abrazo
Kozure
cosa complicada esa de los habitantes de la calle, como son llamados en estos dias (depronto en un par de meses se encuentran un nombre menos ofensivo aún, así son estas cosas). solo quería recordarles que a veces esa idea de sentido de pertenencia, esa bogotá mas bonita, es una cuestión bien relativa. no a todo el mundo sobre todo a los que viven por allá) le parece, por ejemplo, que la vaina del tintal sea muy bonita. ah, anonimo soy yo, es que estaba esperando para aparecer ya con blog y eso.
DON TOMATE: Ese es el punto. En el caso de los vendedores,por ejemplo, por una "Bogotá más bonita" arman un problema social descomunal. No se qué sea exactamente lo que pasa en El Tintal, igual supongo que debe ser algo como lo de los vendedores. Pero en el caso del Cartucho el cuento sí es un gana-gana, igual en cualquier caso nadie sabe a ciencia cierta si para los habitantes de la calle haya o no un mejor lugar. Pero si les aseguran condiciones dignas para su condición, no hay pierde. Igual, como siempre pasa con estas cosas, amanecerá y veremos. Gracias por sus comentario.
el haber quitado la calle del cartucho de este ceptor es soo el primer paso por el problema se traslado al barrio san bernardo en el cual se han refugiado todos los males que traia este cartucho com o la drogadiccion prostitucion etc....
por esto el gobierno debe de actuar pronto para salbar este septor por que es el centro historico de la ciudad no o dejen en manos de los que se aprobechan del mal de las demas personas
No bebemos de ser indiferentes ante este problema debemos ser mas humanos y saber que estas personas necesitan yuda y la mejor ayua que el gobierno les puede dar en quitando todos los focos de espendedores de vicio y prostitucion de este sector
URIBE AYUDALOS SOLO USTED PUEDE ACABA CON ESTE CARTUCHO DE UNA VEZ POR TODAS
Publicar un comentario
<< Home